Cubre toda la gama que pueda existir en asistencia sanitaria: asistencia médica primaria, especializada, asistencia quirúrgica y hospitalaria; y la libre elección del facultativo entre un amplísimo cuadro médico. Tú y tu familia podrán acceder sin excepción, a los mejores y más prestigiosos centros hospitalarios y facultativos del país.
Sin copago: el cliente paga una única cuantía y podrá usar todos los servicios médicos que necesite sin abonar ninguna cantidad adicional.
Con copago: el cliente paga una prima más barata, pero a cambio por cada vez que utilice los servicios de la compañía tendrá que pagar una cantidad en función de lo que se estipule en el contrato. Antes de contratar un seguro de salud con copago, es necesario asegurarse del precio de los distintos servicios médicos que entran en el seguro médico, para luego no llevarse una sorpresa desagradable.
Pólizas de reembolso de gastos: en este tipo el asegurado paga todos los gastos médicos para que luego la empresa aseguradora se los reembolse. El reembolso suele ser de un 80% a un 100% del importe total.
Sistemas mixtos: esta modalidad mezcla el seguro de cuadro médico y la póliza de reembolso de gastos, es decir, el asegurado tiene la opción de elegir los médicos y los centros (siempre que estén dentro del cuadro médico de la aseguradora) pagando inicialmente él lo que es el importe de los servicios sanitarios. Más tarde la aseguradora le reembolsará la cantidad pertinente.